MANIFIESTO 25 DE NOVIEMBRE, I.E.S. VALLE DEL ANDARAX

MANIFIESTO 25 DE NOVIEMBRE, I.E.S. VALLE DEL ANDARAX

Hoy, 25 de Noviembre, conmemoramos el Día Internacional contra la Violencia hacia las Mujeres. Todos sabemos lo que eso significa. Todos hemos oído hablar del infierno por el que pasa una mujer maltratada. Hoy, sin embargo, aunque parezca extraño, no vamos a hablar de mujeres sino de hombres.

Cuando se habla de maltrato hacia la mujer se tiende a generalizar demasiado, y se da al maltratador un protagonismo que no merece. Por eso queremos que los protagonistas de hoy no sean, por una vez, los descerebrados ni los cobardes; ni los violentos, los enfermos de ira y de resentimiento, los locos, los asesinos.
Hoy vamos a hablar de los hombres de verdad. Los que merecen llamarse así con todas las de la ley y por mérito propio. Los verdaderos hombres, los que deben ser modelo para las generaciones futuras, los que van abriendo camino hacia la razón y el sentimiento, hacia la coherencia y la justicia.

Hoy, desde el I.E.S. “Valle del Andarax, queremos destacar el valor de los hombres que escuchan en lugar de gritar; de los que acarician en vez de dar una bofetada; de los que consuelan en ver de inspirar miedo. Porque el hombre de verdad es el que entiende que tener pareja no es poseerla, sino andar con ella el camino. Paso a paso, mano a mano y a la misma altura, apoyándose en el otro cuando estás cansado y viceversa.
El Hombre con mayúsculas no nos corta las alas: nos las da. No nos limita: nos enriquece. No nos prohíbe cosas: nos alienta a hacerlas; no nos carga de responsabilidades: las comparte. Entiende que hombres y mujeres somos diferentes sin que eso signifique que nadie sea mejor que nadie.

Bravo por los hombres que se colocan sin miedo a nuestro lado para mirar adelante. Bravo por aquellos que nos aman en lugar de temernos. Porque la violencia nace del miedo. Miedo a perder el control, el poder en definitiva. Los maltratadores son, sobre todo, cobardes.

Este manifiesto es un canto a la valentía de muchos de los hombres que nos rodean y que realizan una labor inestimable simplemente con su ejemplo. Sus palabras, sus gestos, sus actos, los convierten en modelo a seguir. Queremos agradecerles esa andadura silenciosa que poco a poco va minando la intolerancia y la barbarie y animarlos a continuar a nuestro lado. Son nuestros amigos, nuestra pareja, nuestros hijos, nuestros profesores, nuestros alumnos, nuestros compañeros. A todos ellos, por ser HOMBRES con mayúscula y dar a esa palabra la dignidad y el respeto que merece, gracias.

Canjáyar, 25 de noviembre de 2008

1 comentario:

Nacho Lloréns dijo...

Luisa, me gustó mucho el manifiesto. Espero que llegasé a los demás como me llegó a mí.
Nacho.